Las gentiana o gencianas como son conocidas en Europa como las Hierbas de San Ladislao, son consideradas com un genero de plantas que provienen de la familia gentianaceae, lo cual es considerado como uno de los generos mas grandes de la familia.
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Características de las gentiana.
La gentiana son plantas generalmente perenes, unas pocas especies son anuales o bienales. La mayoría tienen una roseta de pocas hojas basales, sésiles y opuestas. Las flores suelen ser de gran tamaño en proporción con las modestas dimensiones de las plantas, generalmente azules, pero algunas especies tienen flores de color blanco, crema, amarillo o rojo.
Las especies de flores azules predominan en el hemisferio norte, el rojo en los Andes y las blancas en Nueva Zelanda. Solitarias o en inflorescensias, casi siempre espigas, a veces cimas más o menos complejas. Flores generalmente tubulares o acampanadas, actinomorfas, pentámeras. Tubo del cáliz bien desarrollado, algunas veces hendido y espatáceo.
Lóbulos de la corola más cortos que el tubo, alternando con otros, petaloideos, más cortos; estambres insertados por debajo de la mitad del tubo de la corola, sin apéndices, el polen en mónadas; ovario estipitado, el estilo corto o indistinto, persistente, con dos estigmas; nectarios en el estípite del ovario., con cinco pétalos en la corola y el cáliz formado por cinco sépalos El ovario es sésil y tiene glándulas nectaríferas. Fruto en cápsulas, ovoides apuntados. Semillas muy numerosas y pequeñas, con cubierta reticulada.
Plantación de las gentianas.
La plantación de gentiana puede realizarse desde principios de la primavera, y la floración tiene lugar algunas semanas después. Para prosperar, las plántulas deberán ser plantadas en la tierra en un suelo rico y húmedo, ligeramente ácido y enmendado con humus. Será esencial asegurarse primero vez que la tierra esté bien drenada.
Aunque la genciana se beneficia mucho de la luz del sol, es bueno saber que una exposición solar demasiado directa y prolongada tendrá efectos negativos, y por eso conviene más bien privilegiar los lugares frescos y ligeramente a la sombra.
Para la realización de un macizo asegúrese de dejar intervalos regulares de veinte a cuarenta centímetros entre cada planta para no perjudicar su desarrollo y lograr un resultado más armonioso en la floración. Una vez plantadas, las gencianas deben regarse con regularidad hasta que estén bien robustas.
Clima ideal para cultivar las gentianas.
La gentiana es una plata oriunda de las zonas altas y montañosas que tienen entre si una gran humedad, mientras mas grande sea la altitud de las mismas mayor es el contenido activo que poseen las raíces para su cultivación.
las mismas pueden cultivarse en climas un poco mas secos o que estén próximos a la zona mediterránea como en el centro de Europa, son plantas que tienen gran resistencia al frío, la misma puede tolerar temperaturas bajas de hasta unos -15 grados.
La misma gentiana para poder crecer con gran rapidez debe estar expuesta a la plena luz del sol o a una semi sombra que pueda aportar pequeños destellos de luz para la misma, estas plantas no pueden crecer en zonas muy secas o que en las mismas existan vientos muy fuertes, no le son muy favorables las zonas donde el verano es muy seco o caluroso o que las mismas contengan altas temperaturas en ellas, acatar todos estos pasos es fundamental para la preservación de estas hermosas flores.
Mantenimiento de las gentianas.
La gentiana no requieren de un mantenimiento excesivamente estricto. Las especies resistentes cultivadas en un suelo calcáreo o rocoso, por su lado, no necesitan ser regadas de manera abundante. De todas formas, sea cual sea la especieelegida las gencianas requerirán ser regadas con bastante regularidad para que la tierra no se seque demasiado.
Si se vuelven demasiado invasivas, se puede realizar un aclareo de vez en cuando durante la floración para darles un aspecto más prolijo y atractivo. Por otro lado, si bien las gencianas son plantas alpinas no soportan demasiado bien los inviernos duros y los fríos extremos. Del mismo modo, también sufren con el exceso de humedad, que puede dañar considerablemente sus raíces.
En consecuencia, será necesario proteger las plantas adecuadamente desde el final del otoño para evitar que perezcan. Por último, cabe señalar que las gencianas suelen ser plantas resistentes a las enfermedades, excepto cuando el suelo está mal drenado y es demasiado húmedo. En este caso, las plantas pueden ser vulnerables a ataques de hongos que les sean fatales. Para evitar esto hay que asegurarse de que la tierra no esté demasiado húmeda, y así impedir todo desarrollo intempestivo de champiñones.