Si usted es de los amantes de las plantas, y tiene cultivadas en casa, con seguridad debe contar con una Grevillea, porque este género de flores no solo es muy abundante, sino también muy popular.
Muchas especies de Grevilleas son plantas de jardín muy populares, en climas templados y subtropicales. La mayoría de las Grevilleas tienen una natural propensión a cruzarse libremente; esta característica, la hibridación extensa, y los múltiples atributos horticulturalmente deseables, han producido la liberación comercial de muchos cultivares anhelados por los especialistas en esta materia.
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Características de la Grevillea
La Grevillea es un género muy diverso, que cuenta con mas de trescientas sesenta especies; son plantas de hojas perennes, que pertenecen a la familia Proteaceae.

Gravillea juniperina
La Grevillea es un género de plantas nativas de los bosques tropicales de Australia, Nueva Guinea, Nueva Caledonia, Sulawesi, Nueva Zelanda, y algunas islas de Indonesia. Este genero de plantas recibe su nombre en honor a Charles Francis Greville, y abarca desde pequeños arbustos que no superan los cincuenta centímetros de altura, hasta inmensos árboles de más de treinta cinco metros.

Gravillea tamborita
Su nombre científico corresponde a la subfamilia Grevilleoidea, pero también son conocidos como Grevillea, árbol de fuego, roble australiano, roble de Australia, pino de oro, y roble sedoso entre otros.
Las flores de estas especies son de colores brillantes, con la particularidad que no tienen pétalos, ya que consisten en un tubo de cáliz que se divide en cuatro lóbulos con estilos largos.
Su pistilo está envuelto, y en la medida en que van madurando las flores, este se va alargando hasta quedar de forma erguida.
Son plantas que por las características de sus flores, atraen a una gran cantidad de especies de aves; y también son utilizadas como plantas alimenticias por las larvas de algunas especies de lepidópteros, incluyendo también la polilla dryandra.
Entre las especies más conocidas se encuentra el grevillea rosmariniofolia, un arbusto de un metro y medio de altura y de diámetro, que puede florecer los doce meses del año, cuando se cultiva en climas subtropicales.

Grevillea rosmarinifolia
Este arbusto fue uno de los favoritos entre los aborígenes porque al igual que la madreselva, sus flores producen un dulce néctar. Se dice que estos sacudían la flor en su mano para disfrutar del dulzor, y más tarde lo utilizaron con un poco de agua, para realizar bebidas dulces.
En la actualidad se aconseja evitar beber el néctar directamente de la flor, porque algunas especies de grevillea comúnmente cultivadas, producen flores que contienen cianuro, que es altamente tóxico para nuestro organismo.
Taxonomía de las Grevilleas
Estas especies son descritas por el botánico Robert Brown en el año de 1810. Es conocida comúnmente como grevillea de enebro, o hoja de enebro, y flor de araña. Por su parte, el explorador inglés Allan Cunningham reconoció como una subespecie a la Grevillea juninperina.
Grevillea Allo Johnsonii Makinson
Es un arbusto pequeño que no excede los treinta centímetros de altura, y se distingue por tener unas preciosas flores rojas. Aunque tienen mayor presencia en el norte de Nueva Gales, en los Estados Unidos, este arbusto se puede conseguir en gran parte del globo terráqueo.
Grevillea Amphitricha Makinson

Grevillea amphitricha Makinson
Se trata de un pequeño arbusto de exóticas flores amarillas y naranja, que puede tener tres metros de ancho, y crecer ciento veinte centímetros, de altura.
Al igual que la Grevillea anterior, se encuentra en los climas subtropicales de gran parte del mundo.
Por su cómodo tamaño y preciosas flores, es una de las más cultivadas en los jardines de muchos hogares y centros comerciales.
Grevillea Fortis Makinson
Es un arbusto muy vigoroso de llamativas flores rojas, que pueden medir entre uno y tres metros de altura, que se encuentra en las colinas rocosas y laderas cerca de los cursos de agua, más específicamente en ríos, lagunas, y arroyos
Grevillea Juniperina

Grevillea Juniperina
Esta especie es endémica de Sydney occidental, se desarrolla en los suelos arcillosos, aunque puede crecer en otros tipos de suelo; en la actualidad, su hábitat natural está amenazado por la explosión demográfica, el desarrollo de viviendas, y los incendios descontrolados. Esta planta crece como un arbusto que se extiende por un metro y medio de diámetro.
Grevillea Sulphurea
Este es un arbusto que mide dos metros de altura, y crece en los suelos aluviales a lo largo de las riberas, en las mesetas centrales y meridionales. Se caracteriza por tener unas hermosas flores de color amarillo canario en brotes terminales, similares a la crocosmia que se utilizan en los jardines para formar barreras protectoras, o crear división de espacios.
Grevillea Trinervis Makinson

Grevillea trinervis makinson
Este es uno de los pocos arbustos con un hábito espinosos, que al igual que el Grevillea Fortis puede medir entre cincuenta centímetros y un metro de altura; y en muy raras ocasiones puede alcanzar los dos metros.
Ostentan unas hermosas flores amarillas, naranja, y rojas, y se encuentran en la mayoría de los jardines de gran parte del globo terráqueo; porque es una de las preferidas de los amantes de las flores exóticas.
Grevillea Makinson
Este arbusto tiene la particularidad de estar erguido, por lo que sus dos metros de diámetro suele aparentar mucha más altura. Cuenta con flores de color amarillo y rojo, y vive en los cursos de agua, cerca de ensenadas y lagunas.

Grevillea sulphurea
Esta planta también está presente en los bosques de eucaliptos del sur de Nueva Gales, pero como muchas de estas especies, también habitan en buena parte de los cinco continentes.
Contempla y disfruta de diversas especies de las grevilleas en este video.
Como se cultiva la Grevillea
Muchos de estos cultivares han sido seleccionados para uso hortícola, ya sea para formas seleccionadas de híbridos con otras especies, o para ornamentar patios, jardines, centros comerciales, y avenidas en general.
Un prominente criador fue Leo Hodge quien fue uno de los primeros interesados en las grevilleas, cuando consiguió unas plántulas de este género en su jardín. Este criador realizó diferentes ensayos con diversas especies de grevilleas, siendo la especie poorinda queen, la primera en florecer, en el año 1952

Grevillea juninperina
Desde entonces, muchas formas e híbridos han sido comercialmente propagadas y vendidas en todo el mundo, unas con más actractivo horticultural que otras, pero todas se han propagado por todo el mundo, por tener unas flores muy bellas, exóticas, y diferentes.
Para cultivar con éxito estas plantas se debe tomar en cuenta el clima, ya que las temperaturas invernales promueven una floración más prolífica, y la poda de ellas, un denso follaje. Estas plantas se propagan fácilmente por esquejes o semillas; sin embargo, la reproducción por esquejes es necesaria e indispensable si se quiere asegurar que las nuevas plantas tengan las misma características del padre.
Reproducción por esqueje
Lo primero que debemos saber sobre la reproducción por esquejes, es que se debe tener mucho cuidado con la manipulación de esta planta, ya que el contacto directo con ella, puede causar una erupción cutánea; por ello es necesario que se utilicen guantes, para realizar el proceso de poda de esquejes.

Grevillea
Al realizar la poda con sus respectivos guantes, debe tratar de escoger los tallos más fuertes y saludables, no menor a los veinte centímetros; se recomienda que sean cinco o seis, porque de esta manera se garantiza el éxito de la reproducción de la planta.
Cada uno de estos esquejes se le deben quitar las hojas, para evitar que empleen energía tratando de mantenerlas con vida, y lavarlos muy bien con un cepillo de cerdas finas, para quitar cualquier vestigio de enfermedad que puedan tener.
Luego de ello debemos colocarlos en una servilleta de papel absorbente, para retirar todo el exceso de agua, para proceder a colocarlos en una bolsa plástica de cierre hermético.
Esta bolsa la colocamos en un sitio completamente oscuro por seis días, sin destapara ni causar ningún tipo de movimiento.
Una vez transcurrido este tiempo, se retiran de la bolsa, y se comprueba que se comienzan a desarrollar pequeños brotes de raíces; por lo tanto, debemos colocarlos nuevamente en la bolsa, por tres días más, para dejar que las raíces crezcan un poco más.

Esqueje germinado
Cuando las raíces hayan alcanzado de tres a cinco centímetros de largo, es momento de sembrar nuestro esqueje.
También le podemos recomendar el uso de enrraizante en los extremos del esqueje, porque esto los estimula para que la raíz crezca mucho más rápido.
Estos enrraizantes están en el mercado, y se pueden conseguir en los viveros y tiendas especializadas en el ramo; sin embargo, en este video puede aprender cómo preparar un enrraizante natural en casa.
Otra manera muy sencilla, pero que tarda un poco más, es colocar los esquejes en un envase de vidrio con agua, cuidando que no reciba la luz del sol directamente, sino a través de una ventana, o a sombra parcial, por aproximadamente diez días.
Usted puede ir monitoreando el proceso, y ver cómo se va formando poco a poco delgados hilos que crecen en un extremo del esqueje, y que no son otra cosa, que las raíces. Con este método se debe tener mucho cuidado que no se evapore el agua, y que tampoco huela mal, ya que esto arruina el proceso.

Grevillea
Una vez que se tienen listos los esquejes, se procede a la siembra, la cual puede ser directamente en el suelo; pero se recomienda que se plante primero en una maceta, y luego que esté bien arraigada trasplantarla en el suelo.
Para la siembra se requiere de un suelo ligero, formado con turba y arena, para facilitar el drenaje, puesto que estas plantas no toleran los encharcamientos, porque tienden a podrir sus raíces.
Se procede hacer una agujero con un lápiz o una brocheta y se coloca el esqueje con mucho cuidado porque en esta etapa las raíces son muy delicadas, y si se trata con brusquedad se pueden romper.

Plantas cubiertas con bolsas
Luego se cubre con el preparado de turba y arena, procurando que el esqueje quede firme, pero sin realizar demasiada presión, y se riega hasta humedecer el suelo, tratando de no mojar el esqueje. Esta maceta se cubre con una bolsa plástica transparente, y se coloca a la sombra.
Cada tres días, se retira la bolsa, que haces las veces de invernadero, para controlar la humedad, y si es necesario, se debe humedecer nuevamente la tierra. Cuando comiencen aparecer las primeras hojas, podemos estar seguros que los esquejes funcionaron; y a partir de ese momento retiramos la bolsa plástica, y colocamos nuestra maceta en un lugar donde reciba más luz, pero no sol directo.
Una vez que esté robustecida nuestra grevillea, ya es momento de trasplantarla al suelo, si es lo que se desea, teniendo en cuenta, que esta es una planta que puede crecer mucho, por lo que se requiere de un buen espacio para que pueda expandirse naturalmente.

Grevillea petrophiloides magnifica
Lo más aconsejable es que el trasplante se realice en verano y primavera, y luego se realiza el abono cada dos semanas hasta el momento de la floración, en donde se reduce o suspende dependiendo de la especie. Se recomienda colocar humus líquido en el agua del riego, ya que este es un fuerte estimulante de la floración, y coadyuvante para que la planta produzca flores sanas y más brillantes.
Conozca otras técnicas de reproducción a través de esquejes, en este video.
Reproducción por semillas
La mayoría de los horticultores y expertos en la materia prefieren realizar la reproducción de esta planta por esqueje, porque las semillas de grevilleas al igual que las clematis, tiene la particularidad que son muy difíciles de germinar.
Pero si usted de todas formas quiere probar suerte con este método, lo primero que debe hacer, es adquirir las semillas en los viveros o tiendas especializadas de su comunidad, y también puede pedirlas por internet, y se las llevan hasta la puerta de su casa.

Semillas de Grevilleas
Cuando tenga las semillas en su mano, antes que nada, debe colocarlas en una preparación de té de rama, o de bolsita, por toda la noche, ya que de esta manera se hidratan, y se preparan para una posible germinación.
Luego de veinticuatro horas retiramos cada una de las semillas del líquido, y lo reservamos.
En una servilleta de papel absorbente, vamos a colocar las semillas de grevilleas, dejando una distancia de tres a cinco centímetros entre ellas; y una vez que hallamos colocado todas nuestras semillas, colocamos otra servilleta sobre las cemillas para cubrirlas.
Con el agua que habíamos reservado, la colocamos en un envase que tenga un aspersor, y rociamos las servilletas, hasta que esta se humedezca, pero sin llegar a empapar.
Colocamos la servilleta con las semillas en un lugar completamente oscuro, y lo dejamos ahí por cinco días. Usted puede verificar que no se sequen mucho las servilletas, y si esto sucede, con el líquido que tenemos en el aspersor, volvemos a rociarlas.
Transcurridos los cinco días, podemos notar que ya comienzan a germinar las semillas, pero las dejamos por tres días más en la sombra, hasta que la raíz crezca un poco más.

Bandeja de semillero
Mientras tanto, podemos preparar la bandeja de cultivo, en donde vamos a plantar nuestras semillas. Para ello podemos emplear un cartón de huevo, envases de yogur, o cualquier otro envase, si no se cuenta con la bandeja diseñada para ello.
Debemos preparar un sustrato que está conformado por una parte de tierra abonada, y dos partes de turba, en cada uno de los espacios colocamos esta mezcla y con la ayuda de un lápiz o una brocheta, realizamos un pequeño hollito, en el que vamos a colocar con mucho cuidado las semillas ya germinadas.
Una vez que introducimos las semillas germinadas en cada uno de los espacios de nuestra bandeja semillera, las cubrimos con la mezcla sin presionar, y regamos hasta humedecer el sustrato. Es una buena idea mezclar el agua con humus de lombriz líquido, porque este es un estimulante natural, que estimula a la semilla para que germine más rápido.

Semillero
Luego tapamos con una bolsa plástica el semillero, para proceder a colocarlo a la semi sombra.
Cada tres días, se retira la bolsa, que haces las veces de invernadero, para controlar la humedad, y si es necesario, se debe humedecer nuevamente la tierra. Cuando comiencen aparecer las primeras plántulas, podemos estar seguros que las semillas funcionaron; y a partir de ese momento retiramos la bolsa plástica, y colocamos nuestra bandeja en un lugar donde reciba más luz, pero no sol directo.

Plántulas de grevillea
De esta manera seguimos supervisando nuestro semillero, hasta que las plántulas alcancen una altura de tres a cinco centímetros; y es justo en este momento, en donde podemos plantar nuestras grevilleas.
Una vez que se tienen listos las plántulas, se procede a la siembra, la cual puede ser directamente en el suelo; pero se recomienda que se plante primero en una maceta, y luego que esté bien arraigada trasplantarla en el suelo.
A partir de aquí, se procede como ya vimos anteriormente, de la misma manera se escoge una maceta adecuada, teniendo en cuenta si se va cultivar en ella, o si es para que cumpla la función de arraigo nada más.
Para la siembra se requiere de un suelo ligero, formado con turba y arena, para facilitar el drenaje, puesto que estas plantas no toleran los encharcamientos, porque tienden a podrir sus raíces; es por ello, que se debe revisar muy bien los agujeros de la maceta, para garantizar que la planta tenga un buen sistema de drenaje.

Grevillea en maceta
Se llena la maceta hasta la mitad con el sustrato, y se coloca la plántula con mucho cuidado porque en esta etapa las raíces son muy delicadas, y si se trata con brusquedad se pueden romper; se termina de llenar la maceta con el resto de sustrato, y se riega humedeciendo la tierra. Luego colocamos nuestra maceta en un lugar donde reciba más luz, pero no sol directo.
Una vez que las plantas estén bien arraigadas y fortalecidas, se pueden trasplantar al suelo, en el lugar que tenemos destinado y pensado para ellas.
Si usted no cuenta con una bandeja de semillero, en este video puede aprender como hacer una con un cartón de huevos.
Cuidados de las Grevilleas
Las grevilleas suelen ser un género que tolera una gran variedad de suelos, aunque prefiere los ligeros para su crecimiento; es por ello que requieren de un terreno bien drenado, y sobre todo bien abonado, para que pueda crecer y desarrollarse muy bien.
Cuidados de riego
A diferencia del jazmín, esta planta no soporta grandes períodos de sequía, por lo que deben ser regadas dos o tres veces por semana, de manera abundante, para que el terreno esté húmedo, pero se debe tener especial cuidado de no encharcar, porque esto en muchas ocasiones es fatal para la planta.

Grevillea
En los meses de verano se debe incrementar un poco el riego, para evitar que la planta se resienta, pero en otoño e invierno, se debe regar justo lo necesario, solo para no dejar que se seque el suelo.
Cuando se decide al cultivo de las grevilleas en maceta, se recomienda que estas se elijan de terracota, ya que estas, con respecto al plástico, permiten que el sustrato transpire mucho más, y se puedan corregir posibles errores en el riego.
Cuidados de fertilización
No es necesario que se emplee demasiado fertilizante en las grevilleas, no obstante, el abono cuando comienza la primavera puede estimular favorablemente el crecimiento de las flores; pero se debe prestar especial atención en ello porque si el abono tiene demasiado nitrógeno puede ser nocivo para la floración, y producir que esta sea insuficiente.
Cuando la gravillea va florecer es aconsejable colocar humus de lombriz líquido en el agua de riego, porque está demostrado que este fertilizante natural, estimula la floración de esta y otras plantas, haciéndolas más duraderas, y mucho más brillantes.

Grevillea gloriosa
Una vez que se produce la floración, se debe suspender todo tipo de fertilización, para que no se comprometan las futuras floraciones de la planta.
Siempre puede conseguir en el mercado fertilizantes adecuados para cada una de sus plantas; solo tiene que dirigirse a su vivero más cercano, y allí le pueden aconsejar cuál es el más apropiado para sus requerimientos. Pero si usted es de los que le gusta ensuciarse las manos, en este video puede aprender a realizar el compost orgánico en casa.
Cuidados de poda y enfermedades
Esta planta es muy resistente, por lo que no se ha documentado que sea sensible a ningún tipo de enfermedad; y en cuanto a la poda, tampoco requiere de un régimen de poda específica; solo la puede realizar, para darle la forma que usted desea, y controlar su crecimiento, sobre todo cuando la grevillea se ha cultivado en macetas.
Usos de la Grevillea
El botánico Allan Cunningham envió semillas de la Grevillea Juniperina a Inglaterra, porque este consideraba que era una planta de una madera muy noble a la cual se le podía sacar muchos beneficios, y por ello en el año siguiente comenzó a ser cultivada, hasta el día de hoy.

Mesa de Pembroke
De hecho tuvo mucha razón, porque la madera de estas plantas se ha utilizado en la elaboración de muebles que han pasado a la historia en aquel país.
En una mesa de Pembroke, notable diseñador de muebles, que consta de dos cajones y lados plegables, se empleó una chapa de madera de grevillea, la cual fue fabricada en el año 1790.
La madera que se utilizó para realizar esa chapa, es la llamada madera de vaca, y logró tanto renombre con ella, que esta mesa se encuentra en la actualidad, en el Museo Nacional de Australia en Canberra.
Pero este no es el único uso que se le dio a esta planta, ya que gracias a su larga floración, este atrae una gran cantidad de especies de aves, que buscan satisfacerse con el dulce néctar de sus flores, y también debido a su denso follaje, es un buen lugar de anidación y refugio para ellas.

Grevillea robusta
Este es un atractivo para las personas que tienen la suerte de contar con una planta de estas en su casa, porque no solo disfrutan de la extrema belleza de sus flores, sino que también disfrutan del espectáculo que ofrecen las aves cuando llegan a alimentarse de ellas.
También sus flores son utilizadas para realizar arreglos florales exóticos, que se presentan en diferentes concursos, y de igual manera son empleados para decorar los salones en donde se llevan a cabo todo tipo de celebraciones.
Usted también puede disfrutar de una planta de grevilleas en su casa, ya que con los conocimientos que ha adquirido con este artículo, esta en la capacidad de plantar uno y ofrecerle los cuidados que ella requiere.
No lo piense más, nosotros le garantizamos que si sigue los consejos que encontró en esta lectura, con seguridad alcanzará el éxito, y podrá disfrutar de la belleza de sus flores magníficas.